I never feel magic unless I'm with you

16 octubre, 2011

Bigott en Lisboa

Curiosamente, era hace un año, más o menos, cuando recomendaba aqui el disco de Bigott, This is the beginning of a beautiful firendship (disco que ya se encuentra en mi colección de vinilos). Amistad que se consolidó el jueves pasado, cuando por fin pude disfrutar de un concierto este grupo zaragozano, liderado por el genial Borja Laudo. Y quien me iba a decir a mi que los vería, por primera vez, aqui en Lisboa. El concierto era en un lugar peculiar, el Lounge Bar, tipo el Torgal de Ourense, en el que los artistas están al mismo nivel que el público, y sin nada que los separe (aqui habia tan poco sitio, que ni existía ese circulo de la vergüenza que comentó precisamente David Taterstall en el concierto de los Wave Pictures en el Torgal). Menos mal que mi altura, como siempre, me permitió observar bien, como muestra la cutre foto que saque con el móvil e ilustra esta pequeña crónica. Aunque tenia pensado ir solo si hiciese falta, de las ganas que tenia de verlos, al final aún conseguí que unas cuantas personas se apuntasen al plan, más que nada por que era gratis, pero tengo que decir que me alegró mucho el que quedasen satisfechas con el concierto. Bueno, a lo que iba, que era comentar el concierto. A pesar de estar anunciado a las once, hora tardía ya para Portugal, a esa hora estábamos solos en el local, con los camareros, y los instrumentos del grupo. Poco a poco empezó a llegar gente, y al rato ya se veian por alli a los miembros del grupo. Por tanto, con algo de retraso (que es un poco putada, si al dia siguiente tienes que despertarte a las 5 y media, pero bueno, mereció la pena), comenzó finalmente el concierto. Un Bigott de pocas palabras, eso si, pero mucho baile, en cuanto tenia oportunidad, ni buenas noches dijo, y lo único que habló en toda la noche fue un tímido gracias al marcharse. Sonaron las principales canciones del disco anterior: Dead Mum Walking, Cool Single Weeding, o Splanke Motion, además de alguna de su disco Fin, que tengo poco controlado (cosa que estoy solucionando ahora), y, supongo que canciones del disco nuevo, aunque no recuerdo escuchar el single, Cannibal Dinner. Eso si, las canciones ganan fuerza y matices en su versión en directo. Si a eso, se le acompaña con las caras y bailes de Bigott, el resultado es un concierto inolvidable. Me dió la sensación, que algunos momentos, por la cercanía, la fuerza, no sé, pero que fueron de los mejores que disfruté este año de conciertos en Lisboa, y eso que, por suerte, la lista es larga después de ocho meses (y aún quedan algunos nombres que añadir)... Después del concierto, tras solo un bis, que se hizo breve, acudí a comprar mi vinilo, y pude darle la enhorabuena a Clara Carnicer, que estuvo al mando del bajo, y que es la musa de Bigott, para más señas. Espero que se pasen por Galicia próximamente, por que se de una persona que tiene muchas ganas de verlos, y yo muchas ganas de acompañarle para repetir.

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Sonando: Bigott / Cannibal Dinner

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