El concierto de los monos

Por fin tengo una foto para ilustrar este post, despues de un mes de espera. Pero me apetecía ilustrar este concierto con una foto que no fuera robada por ahi, si no una foto sacada en el propio concierto. Lo malo, que el fotografo es algo lento en eso de seleccionar las fotos y tal, pero bueno, tampoco fue para tanto la tardanza. Una vez explicado esto, pues recordar un poco el concierto en si, que es lo importante... Despues de las correspondientes cañas (finos, en portugués de arriba) de Superbock para entrar en ambiente, y la francesinha de rigor, para tener energias durante el concierto, nos plantamos en el Coliseum, a dos calles de donde teniamos el coche, con ganas de disfrutar de los monos. Despues de apurar una caña, entramos a ver a los Mistery Jets, que tocaron un ratito, no lo hicieron mal, pero que se notaba que no eran para nada los protagonistas de la noche... despues de media horita de espera, los monos hicieron su entrada en escena, con ese look melenudo que se gastan ahora. Una decoración de escenario sencilla, donde las protagonistas eran dos grandes pantallas colocadas a cada lado del escenario, donde podiamos ver con más detalle a los miembros del grupo. Y el concierto empezó con uno de los temas de Humbug, Pretty Visitors, los que predominarian en el setlist de la noche, dejando tan solo un par de canciones del disco fuera. Y entre estos más calmados y oscuros que los dos anteriores discos, iban intercalando pequeños pildorazos anteriores, como pueden ser Brianstorm (segunda canción de la noche), The View From The Afternoon, I Bet You Look Good On The Dance Floor (esta es ya un clásico de los ultimos años, y fue de las más celebradas, obviamente), o When The Sun Goes Down, todas ellas con un ritmo claramente diferente, haciendo saltar sin para a la gente, frente a los temas de su último disco, menos frenéticas. Para mi gusto, la evolucion que han sufrido ha sido para bien, ya que, antes eran más inmediatos, si, pero ahora han ganado en profundidad, sus canciones se dejan escuchar mucho mejor, al menos para mi, que mientras que el Humbug lo escucho cada poco, los dos primeros discos hace muchísimo que no lo hago. Y como músicos, se ve que han ido ganando experiencia, sobre todo, desde aquella vez que los vi en Benicassim, hace tres años. Antes eran unos chavalines, ahora son unos chavales algo más mayores, y con bastante más experiencia, y eso se nota. Para los bises, dejaron Fluorent Adolescent, quizá la más conocida de su segundo disco, y terminaron con 505, con la que, al parecer, acaban todos sus conciertos. Un concierto genial, la verdad, el público bastante entregado, el lugar, muy chulo para hacer conciertos, y los Arctic Monkeys estuvieron a la altura, sin duda.

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Sonando: Arctic Monkeys - Catapult